El niño, guiado por un maestro interior trabaja infatigablemente con alegría para construir al hombre. Nosotros educadores, solo podemos ayudar. Así daremos testimonio del nacimiento del hombre nuevo’
La mejor forma de colaborar con el desarrollo infantil adecuado es proporcionar todos los elementos necesarios para ello y contribuir con una estimulación positiva basada en la atención, respeto por las etapas infantiles y amor.